Empleados de petroleras siguen en la mira de la guerrilla

El asesinato de Germán Arturo Ariza Camacho y Jairo Aguilar, trabajadores de una firma contratista de Ecopetrol que este fin de semana reparaba en Teorama (Norte de Santander) un tramo del oleoducto Caño Limón- Coveñas, no es un hecho aislado.
En la escalada contra la infraestructura petrolera, que se ha intensificado en los últimos tres años, las Farc y el Eln han seguido violando los mandatos del Derecho Internacional Humanitario que los obligan a respetar a la población civil y a excluirla de sus acciones armadas. Además de los atentados indiscriminados, también están atacando las cuadrillas de trabajadores que reparan los daños de sus ataques.
La acción del domingo, con francotiradores y contra el grupo de trabajadores del oleoducto, es la más grave desde julio del 2012, cuando guerrilleros de las Farc arremetieron contra un campamento de Ecopetrol en Puerto Caicedo (Putumayo), y atacaron a un grupo de mantenimiento. Cinco trabajadores de las firmas Independence y Cotransur murieron en medio del ataque.
Además, tres operarios del pozo habían resultado heridos en la voladura de la instalación, ocurrida días antes.
En junio pasado, 13 civiles fueron heridos en el ataque de la guerrilla del Eln a una instalación del Caño Limón-Coveñas, en Arauca. Dispararon explosivos contra el campamento cuando se realizaba una ceremonia religiosa. Días después, 14 vehículos fueron incinerados en la vía que de Tibú conduce a El Tarra, en Norte de Santander.
Fuente: El Tiempo.com
Imagen tomada como referencia
http://www.eltiempo.com/politica/justicia/ataques-de-guerrilla-contra-contratistas-de-petroleras/14539695