Las medidas que generan malestar en sectores como transporte y minas

Una reunión programada para el próximo 20 de abril en París entre altos funcionarios del gobierno colombiano y representantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) pasará revista a los avances del país para eliminar las medidas que les ponen trabas al comercio y los negocios.
La evaluación se realizará en el marco del Comité de Comercio, que se cumple bianualmente y que ‘pasa al tablero’ a los países que buscan tener los estándares Ocde. Pero, aunque los funcionarios del Gobierno que participarán en la reunión han mantenido total hermetismo frente al informe que rendirán, gremios y representantes del sector privado insisten en que los avances han sido pocos y que el país sigue adoptando medidas administrativas que hacen cada vez más gravosa la actividad empresarial.
La lista es amplia e incluye desde las barreras que tienen para hacer negocios los importadores de licores hasta las empresas farmacéuticas y de propiedad intelectual, identificadas de tiempo atrás. Pero nuevas quejas que aumentan el malestar por los costos adicionales para los empresarios generan desazón porque muchos aseguran que están ‘matando la gallina de los huevos de oro’.
Estas incluyen altas tasas impositivas y de vigilancia impuestas por el Gobierno para aerolíneas; barreras al ingreso de vehículos de carga por reposición; impuestos diferenciales para vehículos con mayores aditamentos de seguridad y más costos para los consumidores, con la posible ampliación en las mezclas de biocombustibles. ¿Qué explica esta inconformidad?
Para los empresarios del sector aéreo, los onerosos impuestos y cargos sobre el valor de los tiquetes hacen mella en las finanzas de las aerolíneas y afectan su rentabilidad, en momentos en que la competencia crece. Gilberto Salcedo, presidente de la Asociación de Transporte Aéreo (Atac) explica que, por ejemplo, si a una persona le regalan un tiquete nacional, tiene que pagar $40.000 por concepto de tasas e impuestos, mientras que si se trata de uno internacional, el costo es de US$133. En una reciente reunión de Iata, que se cumplió en Chile, la asociación internacional de transporte aéreo, quedó claro que después de Venezuela, Colombia es el país con mayores tasas al transporte aéreo.
El segundo tema que preocupa a las aerolíneas, según Salcedo, tiene que ver con la doble vigilancia que se cobra desde 2011, cuando el Plan de Desarrollo estableció que, además de la Aeronáutica Civil, también la Superintendencia de Puertos y Transporte cobraría una tarifa por la vigilancia a las aerolíneas. Según Salcedo, aunque las empresas aéreas representan solo 1,5% de las vigiladas por la Supertransporte –unas 7.500 aproximadamente–, con este cobro aportan 31% del recaudo total.
La norma fue demandada ante la Corte Constitucional y las aerolíneas argumentan que el fallo les fue favorable porque la tarifa fijada violaba el principio de igualdad. Sin embargo, el tributo sigue cobrándose y el litigio con la Supertransporte crece, al igual que los costos de los abogados. En este momento Atac espera que un nuevo caso que llevaron ante el Consejo de Estado dicte medidas cautelares que suspendan los cobros y a las aerolíneas les devuelvan lo pagado.
Fuente: Dinero.com
Imagen tomada como referencia
http://www.dinero.com/edicion-impresa/pais/articulo/desafios-para-el-sector-transporte-y-minas-para-el-2016-en-colombia/222414