El tercer carril entre Río de Oro y Gamarra se hace sobre abismos

Luis Fernando Calderón usa su fuerza y músculos desde hace ocho meses para darle vueltas al molinete con el que tira el lazo que sube a diario los pesados baldes cargados con pedazos de roca sacada desde el fondo de un abismo. Aquí se adelanta uno de los trabajos de infraestructura más complejos en alta montaña.
Él es un operario de la obra transversal Río de Oro-Aguaclara-Gamarra, proyecto vial de cuarta generación (4G) que conectará la región del Catatumbo con Ruta del Sol 2, la troncal central vial que lleva del centro a la Costa Atlántica.
La transversal fue concesionada por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) a Ruta del Sol S. A. S. y fue una de las primeras vías 4G que iniciaron la etapa de construcción el 10 de noviembre del 2015. Hoy, el avance de la ejecución es del 27 por ciento, más rápido de lo programado, hasta ahora. Trabajan simultáneamente en 12 frentes.
La transversal de 82 km de longitud tiene 60 km en terreno plano. Los 22 km restantes son un trayecto en alta montaña. Los carros deben subir lentamente hasta 1.500 metros de altura, por entre montes y cerros peñascosos, con una carretera llena de curvas tan cerradas y estrechas que producen mareo e impiden que el transporte pesado y liviano transite a más de 20 km por hora.
En tan difícil topografía y sin suspender el tránsito de camiones, automóviles y tractomulas cargadas principalmente con carbón e hidrocarburos que van y vienen entre Cúcuta, Gamarra y los puertos fluviales del río Magdalena, el consorcio constructor Ruta del Sol (Consol) hace también un tercer carril de 4 km. En uno de esos puntos es donde trabaja Calderón.
La ampliación de la carretera a tercer carril se hace en el tramo montañoso, que lleva de Aguaclara a Río de Oro. Van construidos 2,4 km de tercer carril, la mitad de lo trazado, sin que se haya suspendido el transporte de carga pesada.
De 10 puentes proyectados, hay tres en obra. Construyeron y pusieron al servicio la glorieta que lleva de Gamarra a Aguachica y avanzan en la circunvalar que sacará el transporte pesado del casco urbano del último municipio.
Una vez se construya la nueva transversal, se espera que el tiempo de viaje en el trayecto se acorte para el transporte pesado en 45 minutos, y para automóviles en 50 minutos.
Fuente Imagen: El Tiempo