La telaraña tras la recompra de la Transportadora de Gas Internacional (TGI)

La Contraloría Distrital abrió juicio fiscal por el polémico negocio de la recompra del 32 % de las acciones de la Transportadora de Gas Internacional (TGI), en el que la Empresa de Energía de Bogotá (EEB), luego de venderlas en 2011 en US$400 millones, las recompró en 2014 por US$880 millones. El contralor Juan Carlos Granados tiene dudas sobre el proceso e incluso habla de posible detrimento para la ciudad. La investigación apenas comienza y para avanzar en ella tendrá que desenredar un negocio en el que participaron empresas de Estados Unidos, Colombia, Perú, España, Islas Caimán y Luxemburgo. (LEA: ¿Vale la pena vender parte de la Empresa de Energía de Bogotá?)
Entre los llamados a rendir cuentas están el exalcalde Gustavo Petro, quien presidía para entonces la junta directiva de la EEB; Sandra Fonseca y Mónica de Greiff, expresidentas de la Empresa de Energía; el exgerente del Acueducto, Alberto Merlano, y el exgerente de la ETB, Saúl Kattan. La polémica no es nueva y los llamados a rendir cuentas ya se han defendido diciendo que fue un gran negocio, porque la EEB recuperó una empresa en crecimiento, que es la principal transportadora de gas del país (con el 48 % del mercado local y 4.000 km de tubería). A pesar de esto, persisten las dudas sobre los detalles de la transacción.
En marzo de 2011, en medio del escándalo del “carrusel de la contratación”, la administración de Samuel Moreno impulsó la venta del 32 % de las acciones que la EEB tenía en TGI Colombia, a la sociedad CITI Venture Capital Internacional (CVCI), con sede en Nueva York. El negocio fue por US$400 millones. El argumento: la necesidad de capitalizar la empresa. (LEA: ETB y EEB, empresas que pesan en el bolsillo)
Aunque se hubiera esperado una venta directa, para el negocio, CVCI creó en Luxemburgo la sociedad Inversiones en Energía Latinoamérica (IEL),que a su vez creó en España (en febrero de 2011) la empresa Inversiones en Energía Latinoamérica Holding (IELH). Fue a través de esta última que se cerró el negocio. Efectivamente, tras la venta, TGI hizo inversiones por US$750 millones, duplicando su capacidad de transporte de gas. (LEA: TGI vende el 31,9% al fondo Citi Venture)
Dos años después, en noviembre de 2013, CVCI anunció la venta de sus acciones en TGI, para concentrar esfuerzos en la puja por la compra de Isagén. Ante el anuncio, la junta directiva de la Empresa de Energía (presidida por el exalcalde Gustavo Petro) aprobó la recompra. En abril de 2014 anunciaron que CVCI había aceptado una oferta por US$880 millones. (LEA: las razones por las que Citi Venture capital se va de la transportadora de gas TGI)
Al conocer detalles del trámite, de nuevo llama la atención el proceso:esta vez fue la EEB la que optó por crear una empresa en el extranjero para adelantar el trato con CVCI. La transacción fue la siguiente: la Empresa de Energía ordenó a TGI Colombia crear en Madrid una sociedad que denominaron TGI España (sin activos). Mientras tanto, la propia EEB se encargó de gestionar créditos con sus filiales por US$880 millones para la recompra.
El dinero se recaudó de la siguiente manera: la EEB prestó US$400 millones; TGI Colombia, US$129 millones; EEB Perú Holdings LTD (constituida en Islas Caimán), US$38 millones, y el último préstamo del que se tiene registro lo otorgó Gas Natural de Lima y Callao (Perú), por US$50 millones. Las transacciones se aprobaron en tres semanas. El dinero reunido lo consignaron a las cuentas de TGI España para que, en vez de comprar las acciones, comprara la empresa Inversiones en Energía Latinoamérica Holding, que tenía el dominio accionario. (LEA: EEB se hace al 31,92% de Transportadora de Gas)
Fuente: El Espectador.com
Imagen tomada como referencia
http://www.elespectador.com/noticias/bogota/telarana-tras-recompra-de-transportadora-de-gas-interna-articulo-659626